Seis cosas que transforman tu casa en un santuario

Cuando tu casa es un santuario, simplemente estar allí ya te ayuda a relajarte después de un día intenso. Hay seis posibilidades para transformar tu hogar en ese lugar especial en el que poder relajarte.

1. los relojes de pared

Probablemente ya tendrás el reloj del móvil, en el microondas y en el ordenador, por mencionar algunos. Entonces, para qué necesitas un reloj en la pared, siempre presente, o lo que es peor, marcando con su sonido cada segundo. La relajación en casa no debería tener un tiempo límite, nunca lo permitas.

2. Deja pasar la luz

La ciencia demuestra que la luz natural mejora el ánimo y normaliza nuestra rutina de sueño. Deja las cortinas gruesas para el dormitorio y escoge tejidos para el resto de la casa que dejen pasar la mayor cantidad de luz posible en cada habitación.

3. Apuesta por lo natural

Ya hemos hablado del poder de las plantas. Pero también otros elementos de la naturaleza tienen la habilidad de calmar el cuerpo y la mente. Decora tu hogar con maderas naturales o algunas piedras bonitas que encuentres en la playa. Cosas que te traigan a la mente el aire libre.

4. Cuelga felicidad

Evita la tentación de poner en la pared facturas y otras cosas desagradables en tu casa. En lugar del recordatorio de la cita con el dentista, pon el la puerta de tu nevera fotos de tus últimas vacaciones con bonitos imanes de colores.

 

5. Los aromas liberan tu mente

Un verdadero santuario embriaga todos los sentidos y el sentido del olfato es uno de los que más afectan a tu estado de ánimo. Tu casa debería oler a algo con lo que tengas solo asociaciones positivas, algo que te calme y reconforte. Las velas perfumadas son la manera ideal para crear un atmósfera relajante con una fragancia, además de la tranquilizadora sensación que da contemplarlas.

6. Crea una zona Zen

Todos tenemos actividades que nos relajan. SI te gustan las manualidades, haz hueco para una mesa y material. Todos los amantes de los libros necesitan un rincón confortable para aislarse. Usa esos espacios solo para hacer las cosas que te hacen disfrutar y ya verás como tu nivel de estrés disminuye en cuanto entres allí.

Tu casa es el lugar en el que deberías sentirte más en casa. Debería llenarte de relajación y positividad y, siguiendo estos 6 consejos, seguro que te sientes más que feliz volviendo a ella después de un largo día de trabajo.