En el último día, exploraremos qué es la inteligencia artificial y cómo puede afectarnos. También veremos algunos consejos sencillos para que nuestras redes sociales sean un lugar más feliz.
DÍA 5 ARTÍCULO: ¿Cómo influye la Inteligencia Artificial en nuestras emociones?
Los dispositivos inteligentes se han convertido en nuestros salvavidas, pero también influyen mucho en cómo y qué sentimos. Te explicamos por qué.
La IA es uno de los avances tecnológicos más importantes de la historia. Sin embargo, los dispositivos inteligentes basados en esta tecnología, están influyendo en nuestros sentimientos, para bien y para mal.
¿Qué es la IA?
La inteligencia artificial es la capacidad de un ordenador o un robot de realizar tareas o comportarse de maneras que normalmente se asocian a los seres humanos. Las primeras conversaciones sobre la IA tuvieron lugar en la época en la que se inventaron los ordenadores, a finales de la década de 1940. Su propósito original era resolver problemas (matemáticos, para empezar) y hacer que los ordenadores se volvieran tan inteligentes como los humanos. Hoy en día, nuestra vida está plagada de herramientas de IA. Los ayudantes virtuales, como Alexa y Siri, reconocen tu voz, comprenden lo que les dices y realizan tareas por ti. Las redes sociales, como Instagram, saben qué tipo de publicaciones te han gustado y qué clase de contenidos has buscado y, usando esos datos, te recomiendan más de lo mismo. Cuando haces tu compra semanal, el supermercado en línea te sugiere otros artículos que podrían gustarte porque sabe qué sueles comprar normalmente. Todo esto está basado en la tecnología de IA. Y, tanto si te das cuenta como si no, la IA es capaz de planificar, aprender, razonar y resolver problemas por ti.
Cuando la IA nos perjudica
El propósito de la IA es ofrecernos más de lo mismo, para que ni siquiera tengamos que pedirlo o buscarlo. Básicamente, intenta ayudarnos lo máximo posible. Sin embargo, si hacemos clic constantemente en noticias o imágenes deprimentes que hacen que nos sintamos mal, seguirá recomendándonos eso. Es decir, la IA recoge fácilmente y amplifica la tendencia del ser humano hacia la negatividad. Por ejemplo, si haces clic en una cuenta de Instagram dedicada a perros en adopción, después YouTube querrá enseñarte vídeos sobre perros en adopción, tu supermercado en línea te recomendará desesperadamente comida para perros, y los anuncios de Google te venderán seguros para animales. De repente, se pondrá en marcha un efecto dominó impulsado por la IA. “La IA también tiene una espiral de refuerzo. Si mucha gente ve vídeos tontos de TikTok, se mostrará a mucha más gente vídeos tontos de TikTok, porque la IA cree que eso es lo que querrán ver cada vez más personas. Si hay una tendencia fuerte respecto a una opinión política en Twitter, la IA exagerará eso, porque mostrará más de lo que cree que está aprendiendo de nosotros, y las opiniones menos populares quedarán automáticamente descartadas”, explica Mo Gawdat, embajador de Rituals.
Y el hecho de que la IA no sea capaz de entender los matices como los humanos tiene consecuencias en el mundo real. Amazon tuvo que dejar de usar la IA en sus procesos de contratación porque la IA había aprendido patrones de comportamiento de la década anterior (cuando la mayoría de los currículos de informática los enviaban hombres) y esta tecnología se había autoenseñado que los currículos de los hombres eran mejores que los de las mujeres.
Entonces, ¿qué podemos hacer? “Tenemos que empezar a comportarnos con la tecnología del mismo modo que nos comportaríamos con un niño”, recomienda Mo. “No dices palabrotas ni muestras violencia delante de un niño. Y, si no haces esas cosas con la tecnología, la tecnología tampoco te las mostrará. Si interactuamos de forma ética con la tecnología, los principios humanos de la felicidad, la compasión y el amor pasarán a ser los rasgos que la IA amplifique por encima de todo”.
Cómo usar la IA para ser más feliz
Puede parecer que todo es malo, pero la IA también tiene un lado muy positivo. Actualmente, Hitachi está utilizando la IA para crear un dispositivo cuyo propósito es descubrir no solo lo que nos hace felices como individuos, sino también qué podemos hacer para conseguir que la gente que nos rodea sea más feliz e impulsar la difusión global de la felicidad. Del mismo modo que la IA puede amplificar lo negativo, también hay cosas muy sencillas que todos podemos hacer para conseguir que amplifique la positividad y la alegría.
“Mi principal consejo es que no hagas clic en ninguna sugerencia (las páginas que te recomienda Instagram o los vídeos que te sugiere YouTube) porque, en realidad, la tecnología solo entiende fragmentos de lo que te gusta, así que la mayoría de sugerencias solo estarán vagamente relacionadas con algo que te gustó de verdad una vez. Busca específicamente algo positivo y haz clic solo en eso”, aconseja Mo. “Tu ordenador aprenderá qué te gusta realmente y llegará un momento en el que solo te mostrará cosas que te hagan feliz”, afirma Mo. “Ver, comentar y dar al botón de ‘Me gusta’ sin sentido es un desperdicio de tu valioso tiempo y, sin darte cuenta, estás alimentando a la máquina de la IA”.
Por supuesto, no puedes vivir en este mundo y escudarte por completo de la negatividad (echa un vistazo a nuestros consejos para canalizar las emociones negativas aquí). Sin embargo, si empieza a afectar a tu salud mental, hay formas de ponerle freno más allá del simple hecho de apagar el móvil. “Si cierto tipo de noticias te afectan especialmente, ve a tu aplicación de noticias y bloquea ese contenido para que solo se te muestren historias positivas”, aconseja Carl Uminski, director ejecutivo de la agencia digital SOMO. “También puedes desactivar el rastreo entre aplicaciones, lo que reducirá la cantidad de datos sobre ti que se comparten y, por tanto, recibirás menos publicidad y sugerencias personalizadas sobre cosas que podrían gustarte (pero seguramente no)”.
Pero si de verdad te gusta perder algo de tiempo con el móvil (cosa que nos pasa a todos), el auténtico poder está en tus manos. “Antes de pulsar un botón, plantéate de verdad si es algo con lo que vas a aprender o entretenerte. Si no va a aportarte ninguna de esas dos cosas, ¿por qué molestarte? Si más personas usáramos la tecnología para reforzar los mejores valores humanos, para mostrar felicidad, crear positividad y difundir la alegría más allá de nosotros mismos, no solo llenaríamos nuestras redes sociales de cosas que nos harían felices, sino que crearíamos un mundo impulsado por una IA que reflejaría lo que de verdad representa la humanidad. Y eso sería increíble”, afirma Mo.
DÍA 5 - CÓMO PUEDES MANIFESTAR ALEGRÍA EN EL FUTURO TAREA
Las redes sociales se diseñaron para aportar pequeños momentos de felicidad a nuestro día a día y hacer que nos sintamos conectados con el mundo. Sin embargo, también pueden provocar problemas de autoestima y negatividad. Por suerte, hay maneras de evitar esto. “La tecnología quiere sugerirte cosas y, para ello, usa información sobre lo que has visto anteriormente. Si buscas contenidos que te hagan feliz, la tecnología te mostrará más información de ese tipo”, explica Mo Gawdat, el embajador de la felicidad de Rituals. Si sigues estos consejos expertos cada vez que entres en tu cuenta, tu dispositivo se convertirá en una herramienta para la alegría.
1. Encuentra un “hashtag” feliz
“Piensa en tres o cuatro cosas que te hagan sonreír, te hagan reír o te inspiren, y busca un ‘hashtag’ para cada una de esas cosas. Así, tu cuenta estará llena de ellas”, explica la psicóloga Jess Baker. “De este modo, en cuanto abras tu app, será el contenido que verás y que inundará tus redes”.
2. Sigue noticias positivas
Recomiendo muchísimo @goodnews_movement, una cuenta que solo comparte noticias positivas. Me saca una sonrisa cada vez que veo una publicación. Y, puede que no esté siendo objetiva, pero también merece la pena seguir a @ritualscosmeticsspain. En nuestras publicaciones e historias, compartimos consejos de bienestar y trucos para recordarte que te tomes un momento de descanso, incluso en los días más ajetreados”, comenta Merel Hille, Social Media & Influencer Manager de Rituals.
3. Ponte de incógnito
“Todo lo que buscas, escribes en un correo electrónico o etiquetas en Instagram o Snapchat crea ‘cookies’ que rastrean las webs que visitas y las cosas que te interesan. Si le envías un WhatsApp a un amigo sobre unos zapatos, empezarás a ver anuncios de zapatos porque tus ‘cookies’ te están recordando el producto que te interesa”, explica Carl Uminski, director ejecutivo de la agencia digital SOMO. “Para evitarlo, usa el modo de incógnito en tu dispositivo. Es fácil de activar y evitará que te rastreen”.
4. El poder de dejar de seguir
“Haz una criba regularmente de las cuentas que sigues en las redes sociales”, sugiere Carl. “Plantéate a quién estás siguiendo y por qué. Asegúrate de tener a un buen porcentaje de personas a las que conoces en la vida real o con las que te relacionas de otro modo, no solo en las redes sociales (como tu actor o tu cantante favoritos). También puedes preguntarles a tus amigos qué cuentas siguen para reírse y sentirse bien. Pero, en definitiva, si una cuenta no te aporta positividad, es tan fácil como pulsar el botón de “dejar de seguir”.
5. Silencia las críticas
“Buscamos la aprobación de forma innata. Pero la cantidad de ‘Me gusta’ o comentarios que reciben tus publicaciones no mide realmente lo que vales”, explica Baker. Y, ¿cuál es la solución? “Desactiva los comentarios y los ‘Me gusta’ en plataformas como Twitter, Facebook e Instagram (es superfácil, solo tienes que ir a ajustes y seguir las instrucciones), y céntrate en publicar cosas que sean importantes para ti y te hagan feliz, no aquello que creas que le gustará a otra gente”, afirma Baker. “Puedes hacer un experimento: desactiva los comentarios y los ‘Me gusta’ durante una semana y comprueba cómo te sientes durante ese tiempo y si eso ha influido en tus niveles de positividad. Si notas que te sientes mejor, desactiva los comentarios para siempre”.
¡Enhorabuena! Has terminado tu masterclass Alegría para el mundo de 5 días. Esperamos que ya notes ese extra de felicidad y hayas descubierto maneras sencillas de repartir alegría entre los que te rodean. Si quieres más consejos para mejorar tu bienestar personal, haz clic aquí.