Kitchari: una receta Ayurveda para cuidar el estómago

Una receta sana y reconfortante: descubre los beneficios sanadores y ayurvédicos que ofrece el kitchari.

El kitchari es sin duda el plato estrella del Ayurveda. Es una receta muy fácil de digerir y contiene una gran variedad de especias saludables. Después de un día ajetreado, me encanta sentarme en el sofá y saborear cada reconfortante cucharada de kitchari. Es un plato con muchas versiones (con o sin arroz, por ejemplo), pero esta ofrece el equilibrio perfecto entre sencillez y sabor. 

Tiempo de elaboración: 45

Porciones: 4

 

Ingredientes:

  • 2 cebollas bien picadas
  • 4 dientes de ajo
  • 8 cucharadas de gui
  • 1 cucharada de jengibre fresco rallado
  • 2 cucharadas de curry en polvo
  • 1 cucharada de comino molido
  • 1,2 litros de caldo de verduras
  • 2 tomates bien picados
  • 600 g de judías mungo, partidas por la mitad
  • 1 cucharada de escamas de chile
  • 4 cucharadas de yogur de coco (o yogur griego normal)
  • 1 lima cortada en cuñas
  • Hojas de menta frescas

Instrucciones:

  1. Cocina la cebolla y el ajo en la mitad del gui hasta que estén blandos y luego añade el curry en polvo, el jengibre y el comino y saltéalo bien hasta que suelten su aroma.
  2. Echa el caldo de verduras, los tomates y las judías mungo escurridas y sube el calor hasta que empiecen a hervir.
  3. Deja que cuezan durante 35-45 minutos, añadiendo más caldo o agua si se evapora demasiado.
  4. Mientras, prepara el gui con chile, mezclando el resto del gui en una cazuela con las escamas de chile.
  5. Comprueba si las judías cortadas están tiernas y, si lo están, sirve el kitchari en un bol con el gui de chile, el yogur de coco, un chorro de lima y unas hojas de menta.
Winnie Verswijvel

Winnie Verswijvel

Trading her psychology books for cookbooks, Winnie Verswijvel now creates recipes and writes culinary articles for various clients. A woman of many talents, she also doubles as a food stylist and steps behind the camera to shoot pictures of the delicious plates she makes.  

This Flemish food lover fell in love with Amsterdam, where she has been turning her kitchen upside down for several years now. Often found strolling local markets carrying a huge pile of vegetables, Winnie does not shy away from a little spice and is always on the lookout for surprising flavours.