Descubre la ciencia de las afirmaciones positivas y cómo aprovecharla mental y físicamente

Las afirmaciones positivas, son frases cortas y positivas que te repites a lo largo del día con el objetivo de manifestar un cambio y quererte más. Puede parecer raro decirse cosas como “Elijo ser feliz” en voz alta delante del espejo, pero estas afirmaciones breves ayudan a mejorar el estado de ánimo. ¿Se trata de un tipo de magia? No. Hemos investigado la ciencia que esconden detrás las afirmaciones positivas, cómo usarlas y sus beneficios para la salud. A continuación encontrarás todo lo que necesitas saber sobre el poder de estas frases cortas y motivacionales que te ayudan a alcanzar tus objetivos.

Afirmaciones positivas: ¿en qué consisten?

Una de las acepciones de “afirmar” significa decir algo “que es verdadero y positivo”. Por lo tanto, una afirmación consiste en declarar un pensamiento positivo y reafirmarlo como verdad. Es una frase breve que te motiva, te inspira y te anima a entrar en acción y a luchar por tus objetivos. Para aprovechar al máximo una afirmación positiva, repítela con frecuencia para que se grabe en el subconsciente y poder alejar así los pensamientos negativos. Repetir ideas y frases positivas aporta poder, porque escucharlas con frecuencia te ayudará a creer en ellas, a dar forma a tu realidad y reconfigurar tu cerebro.  

Afirmaciones positivas: ¿cómo funciona?

Practicar las afirmaciones positivas es extremadamente sencillo: todo lo que necesitas hacer es elegir una frase y repetirla. Según The National Science Foundation, alrededor del 80 % de los 50 000 pensamientos subconscientes que todos experimentamos en un día son negativos. Para darle la vuelta y no ahogarse entre tantos pensamientos negativos, las afirmaciones positivas van a ser tus nuevas mejores amigas.

Según varias investigaciones, las afirmaciones positivas te pueden ayudar a tener un mejor rendimiento en el trabajo. Dedicar solo unos minutos a pensar en tus cualidades buenas antes de una reunión importante (una evaluación del rendimiento, por ejemplo) puede calmar los nervios, aumentar tu confianza en tus capacidades para lograr lo que quieres y mejorar tus posibilidades de éxito. Las autoafirmaciones también pueden ayudar a mitigar los efectos del estrés. En un estudio, un breve ejercicio de afirmaciones positivas mejoró las habilidades de resolución de problemas de sujetos con “estrés crónico” hasta el nivel de los que tenían un nivel de estrés bajo. Funcionan porque cuando te repites algo, se convierte en la realidad. Y eso es justo lo que buscas.

Los beneficios de las afirmaciones positivas

Repetir una afirmación positiva todos los días te ayudará a:

• Aumentar la felicidad
  Las afirmaciones positivas te permiten reconocer las cosas que se interponen en tu camino hacia la felicidad, lo que, a su vez, te permite rodearte de las cosas que deseas en tu vida.
• No perder de vista las cosas pequeñas
  A menudo damos por sentadas las cosas pequeñas. El uso de afirmaciones positivas te permite recordar lo importantes que son precisamente esas pequeñas cosas. Por ejemplo, si estás sano, es posible que ni siquiera lo pienses, pero, si usas “Estoy sano” como afirmación positiva, podrás concentrarte en ello y apreciarlo.
• Una mayor autoestima 
  Las afirmaciones positivas pueden mejorar la opinión que tienes de ti mismo y fomentar la confianza en tus capacidades para lograr determinados objetivos.  
• Reducir los pensamientos negativos
  Como muchos de nuestros pensamientos (alrededor del 80 %) son subconscientes, las afirmaciones positivas nos permiten ser más conscientes de nuestros patrones de pensamiento y sentimientos. Así, reducimos el riesgo de que se formen patrones de pensamiento negativos.
• Mejor estado de ánimo 
  Las afirmaciones positivas te ponen de buen humor. Un estudio reciente muestra que el optimismo reduce el riesgo de ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares y otros eventos cardiovasculares.

Afirmaciones positivas: cómo se usan

Aunque todo el mundo puede empezar a poner en práctica las afirmaciones positivas, te damos algunos consejos:

• Dedica unos ratos específicos del día a repetirlas. Un buen momento puede ser por la mañana o antes de irte a dormir. Se trata de algo personal, así que prueba distintos momentos para ver cuál te funciona mejor.
• Es muy importante usar el tiempo presente, porque lo que quieres son resultados ahora, no en el futuro.
• No pasa nada si te asaltan pensamientos que te producen ansiedad. Solo tienes que darles la vuelta y transformarlos en un pensamiento positivo sobre cómo puedes seguir tu camino a pesar de ellos. 
• Al introducir estas declaraciones positivas en tu rutina diaria, ayudas a que la mente dé prioridad a lo positivo frente a lo negativo.

No hay normas establecidas sobre la frecuencia, pero según el psicoterapeuta Ronald Alexander de The Open Mind Training Institute, las afirmaciones positivas se pueden repetir hasta tres o cinco veces al día para reforzar la creencia. ¿Escribes? ¡Genial! Escribir las afirmaciones en un diario y practicarlas frente al espejo es un buen método para que sean más poderosas y efectivas.

Afirmaciones positivas que puedes probar

Si quieres probar las afirmaciones positivas después de leer este artículo, hemos recopilado las más populares por si quieres empezar por ellas.

Solo yo decido cómo me siento
Creo en mí y confío en mi sabiduría
Tengo el control de mis pensamientos y no me juzgo
Tengo éxito
Confío en mí y se me da bien lo que hago
Elijo ser feliz
Tengo suerte y me rodean unos amigos y una familia estupendos
Soy resistente, fuerte y valiente y no me van a destruir
Cuando me voy a dormir, todo está como debería y descanso con tranquilidad
Me acepto y me quiero por completo

Esperamos que notes un mayor control sobre los pensamientos negativos y que consigas evocar sentimientos de felicidad genuina.