Shinrin-Yoku: sumergirse en el bosque como forma de curación

En Japón, se habla de “sumergirse en el bosque” como una herramienta para encontrar la paz y sanar. Sumergirse en el bosque consiste adentrarse en un bosque durante horas y empaparse de las vistas, los olores y los sonidos. Te mostramos cómo puedes sumergirte en esta poderosa actividad, el shinrin-yoku.

 

Si todo tu contacto con el exterior consiste en caminar desde el coche a la oficina, tranquilo: no eres el único. En la sociedad actual, pasamos cerca del 90 % del tiempo en espacios cerrados. El resultado es una desconexión cada vez más pronunciada de la naturaleza y su potencial como curación y sustento.

 

Shinrin-yoku

En Japón, el país con la mayor densidad de población, caminar de manera mindful por el bosque se ha convertido en una manera de gestionar el estrés de la ajetreada vida moderna. Shinrin-yoku, que se traduce literalmente como “baño en el bosque”, es una terapia oficialmente reconocida en Japón. De hecho, es una parte importante del programa de sanidad pública del país.

 

Se considera que sumergirse en el bosque tiene importantes beneficios mentales y físicos. Cada vez más estudios muestran que el mero hecho de estar en el bosque y absorber su atmósfera a través de los sentidos tiene efectos curativos para el cuerpo y la mente. Los efectos del shinrin-yoku que la ciencia ha demostrado incluyen una reducción de los niveles de estrés, mejora del sueño, una mayor concentración y creatividad, recuperación más rápida de enfermedades, un sistema inmune reforzado y una mayor sensación general de felicidad.

 

Cómo sumergirse en el bosque

Incluso una única excursión al bosque puede ayudarte a relajar la mente y el cuerpo, pero las investigaciones sugieren que deberíamos sumergirnos en el bosque al menos una vez al mes para disfrutar de todos los beneficios saludables del shinrin-yoku. Para empezar, todo lo que necesitas son tus cinco sentidos y un bosque.

 

Los japoneses usan bosques y senderos designados específicamente para practicar el shinrin-yoku, pero puedes hacerlo en cualquier zona con árboles. Puedes practicarlo en solitario o con compañía, si eso te resulta más cómodo. Deja el móvil en casa o al menos asegúrate de que está apagado mientras estés en el bosque.

 

Disfruta de unas horas entre los árboles, sin hacer nada más que experimentar lo que te rodea: los aromas de los árboles y la tierra, los sonidos de los pájaros y las hojas en el viento, la luz que atraviesa las ramas y cae sobre tu piel… Solo tienes que estar presente: el bosque se encargará de lo demás.