Vivir sin generar residuos: ¿es factible?

De primeras, debo reconocer que tengo un poco de escepticismo. No creo que sea posible vivir sin generar ningún desperdicio a menos que te mudes a una granja en medio de la nada y cultives tus propios productos. Pero sí que creo que podríamos, y deberíamos, adoptar algunas pautas en nuestras rutinas diarias.

 

¿Qué es la tendencia de cero residuos?

Un tercio de todos los alimentos producidos en todo el mundo termina en la basura, según un estudio de 2017. Vivir sin desperdicios significa reducir tus residuos y evitar enviar cosas al vertedero. ¿Recuerdas las dos primeras palabras de esta frase que se escucha tanto, “reducir, reutilizar, reciclar”? Resulta que a la mayoría de nosotros nos resulta más fácil reciclar que reducir y reutilizar. Vivir sin desperdicios no significa renunciar a los lujos de la vida, solo significa ser más consciente de tus elecciones como consumidor. No se trata necesariamente solo de reciclar más, sino de tener que reciclar menos tomando mejores decisiones.

 

Una vida sin residuos

En 2013, Bea Johnson, la activista medioambiental, escritora y oradora motivacional con sede en EE. UU., nos presentó dos R más: “rechazar y recompostar”. Rechazar elimina una gran cantidad de desperdicios desde el principio. Es decir “no” a las cosas gratis que se convierten en un desperdicio instantáneo. En cuanto a recompostar, hay muchas formas diferentes de compostaje a las que puedes optar incluso si tienes un espacio al aire libre limitado o nulo (Como los hoteles de gusanos). Cada vez más municipios de todo el mundo están echando una mano con el compostaje de “estilo urbano”, como Compost Pickup Services. Te animamos a echar un vistazo para ver si hay alguna iniciativa cerca.

 

 

10 CONSEJOS SENCILLOS PARA REDUCIR LOS RESIDUOS

 

1. Intercambio de comida

Busca en tu barrio iniciativas de gestión de residuos de comida que organicen intercambios de comida o comunidades que “rescaten” las verduras feas. Seguro que tienes algo cerca. O también puedes avisar a tus amigos cuando te sobre algo y vayas a tirarlo. 

 

2. Rechaza los plásticos de un solo uso

Y sustituye los desechables con reutilizables. Acepta las cosas que necesitas y rechaza el resto. Evita los envases de plástico y coge una bolsa de la compra reutilizable.

 

3. Compra recargas o envases reutilizables

Compra botellas de agua y tazas de café reutilizables y recargas siempre que puedas, para reducir los vasos de plástico y papel de un solo uso.

 

4. Recicla cuando puedas
Trata de comprar productos que estén hechos de materiales reciclados, que puedan reciclarse o, mejor aún, ¡ambos!

 

 

5. Compra con cabeza

Sé realista sobre lo que realmente necesitas e intenta comprar menos cosas o ir a las tiendas vintage para darle un nuevo hogar a la ropa y los artículos para casa.

 

6. Un plan de comidas

Será tu estrategia personal de reducción del desperdicio de alimentos.

 

7. No malgastes el agua

Evita el lavavajillas, recoge agua de lluvia para regar y opta por las duchas en lugar de los baños con más frecuencia.

 

8. Opta por lo local

Reduce tu huella de carbono y los desechos innecesarios utilizados en el transporte de mercancías comprando todo localmente, desde alimentos y ropa hasta regalos y artículos para el hogar.

 

9. Tecnología ecológica para tu hogar

Desde bombillas de bajo consumo hasta paneles solares en el techo, según tu presupuesto, hay muchas formas de colaborar.

 

10. Reciclar o donar

Dale a esa vieja librería una nueva capa de pintura, o intenta vender o intercambiar artículos en sitios web locales como Facebook Marketplace.

 

Laura Wabeke

Laura Wabeke

La traductora, editora y redactora Laura Wabeke siente fascinación por las palabras y las formas innovadoras en las que se pueden usar para expresarse. Después de nueve años como freelance en el sector de viajes, las agencias de medios, la publicidad y la edición de libros, esta redactora interna ahora domina el yoga, la meditación, el mindfulness y sigue la filosofía de la marca de encontrar la belleza y la felicidad en los pequeños detalles.