Cualquier ayuda para conservar el planeta es bienvenida y estos hobbies son una buena manera de empezar.
En Rituals, nos preocupamos por el bienestar de las personas y del planeta. Por eso hemos lanzado nuestro 10% Profit Pledge, que busca recuperar el equilibrio en el mundo (aquí puedes obtener toda la información sobre nuestras iniciativas). En nuestra opinión, cualquier iniciativa que ayude al planeta es un gran paso, por pequeño que sea. Si te gustaría contribuir a esta causa en tu tiempo libre, puedes empezar por alguno de estos hobbies.
Para ahorrar energía, reducir residuos o usar fuentes renovables, hay que ir más allá de aprender a hacer punto o comprar ropa de segunda mano (y además ambas son ideas estupendas). Te damos algunos ejemplos que puedes probar para pasarlo bien sin dejar una huella negativa en el planeta.
Jardinería urbana
Puede que creas que no tienes nada de jardinero o que te falta espacio, pero cultivar tus propias plantas y verduras no solo resulta muy gratificante, también fomenta la biodiversidad, te permite comer productos sin pesticidas, reduce tu huella de carbono y te anima a seguir el ritmo de las estaciones. Además, tiene muchos beneficios a nivel de salud mental y de vivir el presente: se ha demostrado que la tierra contiene una bacteria que ayuda a liberar serotonina (la hormona de la felicidad) en el cerebro. Así que tanto si solo tienes un par de macetas, un jardín, un huerto urbano o un espacio comunitario, coge unos guantes y ponte manos a la obra.
Aquí puedes consultar nuestra práctica guía de jardinería.
Prueba la apicultura
Responsables de más del 80 % de la actividad polinizadora del mundo, las abejas son la realeza de nuestro ecosistema y casi un tercio de nuestros alimentos procede de la polinización de la miel. Pero necesitan nuestra protección y por eso es tan buena idea que pruebes la apicultura. Hay muchas colmenas en las que puedes echar una mano o, si quieres algo más serio, como tener tu propia colonia de abejas, hay muchos cursos específicos para lograrlo.
Aquí puedes leer más cosas sobre la apicultura.
Descubre el “plogging”
Aunque posiblemente no lo sabías, unas 20 000 personas hacen plogging cada día en 100 países distintos. Una práctica que surgió en Suecia y que combina el running con la recogida de basura, anima a la gente a cuidar del entorno en el que hacen ejercicio. Además, esos días en los que no te apetece ponerte las deportivas tienes una motivación más potente: la de hacer el bien. También puedes hacerlo mientras caminas, vas en bici o en patines, si correr no es lo tuyo.
Elabora tu propia cerveza
Elaborar una pinta de cerveza requiere unos 168 litros de agua y, pese a que hacerla en casa supone invertir en equipamiento al principio, la recompensa para el medioambiente es muy significativa. Puedes usar cereales orgánicos, recipientes de vidrio (nada de plástico), reutilizar la levadura e incluso reciclar en CO2 que se crea durante la fermentación mediante globos especiales (de Mylar) que puedes emplear para carbonatar la cerveza. Así, creas un sistema circular y tienes contentos a tus amigos.
Voluntariado
Si lo que buscas es un hobby ecológico que te haga sentir bien, satisfecho y con significado, elige el voluntariado que más te guste. Puedes adaptarlo totalmente a lo que te interese: colaborar con organizaciones medioambientales que gestionan la limpieza de residuos, plantan árboles o tienen proyectos de conservación; trabajar en una tienda solidaria; pasear los perros para personas mayores o probar con algo más creativo como macramé, upcycling, pintura… Puedes incluso crear un grupo propio en tu comunidad.
Aquí encontrarás los increíbles beneficios de ser voluntario.
Descubre el forrajeo
Una práctica milenaria que se ha vuelto a poner de moda: el forrajeo (o “foraging” en inglés, que consiste buscar alimentos que crecen de manera natural en el entorno) lo practican algunos de los mejores chefs del mundo para producir platos de temporada totalmente dependientes y respetuosos con la naturaleza. Pero necesitas conocer tu entorno antes de lanzarte a la aventura. Si te apetece probarlo, busca el asesoramiento de expertos locales que te pueden contar qué coger y cuándo. Descubrir los ingredientes que la abundante naturaleza te va a proporcionar es toda una delicia.
Las maravillas de la fermentación
Una manera muy eficiente de conservar los alimentos, la fermentación puede volverse adictiva en cuanto descubras lo creativo que puedes ser con solo unos pocos ingredientes. Frutas, verduras, lácteos… Ayuda a reducir los desperdicios de alimentos y a conservar su frescura usando solo un mínimo de energía. Todo lo que necesitas son recipientes de vidrio, agua y sal. Encurtir las pieles de las verduras evita tener que tirarlas a la basura y puedes crear deliciosos snacks. La kombucha y el kefir son estupendos para la digestión y el kimchi usa los tallos y las sobras de verduras para dar un sabor increíble a tus platos.
Aquí puedes consultar nuestra sencilla receta para preparar kimchi.