Orden y calma: seis consejos para lograr la serenidad en casa

El lugar en el que vivimos debería ser un lugar seguro, un espacio en calma donde relajarse después de un día duro. Pero si hay demasiadas cosas ocupando espacio en nuestras casas y nuestras mentes, el hogar se puede convertir en una fuente de estrés. Sigue leyendo para descubrir seis sencillas rutinas que te ayudarán a lograr un hogar sereno y siempre en orden.

Ordenar es mucho más que tener más espacio en el armario o encontrar un lugar libre en el escritorio para apoyar la taza de café. Al acumular muchas cosas inútiles, no solo bloqueamos el espacio físico que nos rodea, sino también el espacio espiritual, emocional y mental. Si nos deshacemos de las cosas acumuladas que nos resultan un lastre, nuestros hogares y nuestras mentes tendrán más espacio para la calma. Para convertir el orden en un hábito, te ofrecemos seis consejos sencillos pero eficientes.

Consejo 1: Vincula el ordenar con una rutina que nunca te saltes

Con miles de tareas que reclaman nuestra atención, establecer el hábito de ordenar puede resultar complicado. Si te cuesta encontrar tiempo para organizar tu casa, combínalo con una rutina que nunca te saltes. Dedica unos minutos a ordenar la encimera cuando te prepares el té de la mañana, saca la basura cuando salgas a dar un paseo por las tardes u ordena el correo o todos esos papeles del escritorio antes de darte un baño el domingo.

Consejo 2: Haz la cama

Hacer la cama por la mañana puede parecer algo insignificante, pero tiene una gran repercusión sobre el día a día. Dedicar unos minutos a estirar las sábanas y mullir las almohadas, te prepara para un día productivo, positivo y lleno de significado. La ciencia nos dice que hacer la cama puede aumentar nuestro nivel de felicidad. Además, una cama bien hecha aporta una sensación de calma y paz al dormitorio, una imagen que nos relajará de inmediato.

Consejo 3: Ordena el armario

Un armario ordenado le resta estrés a la tarea de vestirse por la mañana y lo convierte en un momento agradable, incluso. ¿No te apetece abrir el armario y encontrar al instante lo que buscas? Ten un gesto generoso mientras lo ordenas y dona todo lo que no te hayas puesto en un año. No caigas en la trampa del “por si acaso”: deshazte de las prendas que ya no necesitas, no quieres o no te valen. Otra cosa que debes tener en cuenta es que la clave para tener un buen armario es la calidad, no la cantidad. En el futuro, cuando compres ropa, opta por prendas atemporales, duraderas y versátiles.

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Consejo 4: En el baño, solo lo esencial para el día a día

Los baños normalmente son las habitaciones más pequeñas de la casa y a menudo también son las más desordenadas. Para dar a la tuya una sensación de calma similar a la de un spa, guarda allí solo los productos que usas a diario. Si guardas artículos que no usas a diario en zonas de la casa donde tienes más espacio, podrás organizar bien tus productos básicos, incluso en el baño más pequeño. En vez de llenar el baño de muchos productos distintos, invierte en unos buenos básicos para el cuidado de la piel, de ducha y baño y de maquillaje que cubran a la perfección tus necesidades.

Consejo 5: Usa fragancias relajantes

Las fragancias para el hogar no solo aportan aroma a tu espacio, sino que también ayudan a lograr una atmósfera relajada. Usa velas, barritas aromáticas o incienso para llenar tu espacio y tu vida de calma.

Consejo 6: Diez minutos cada día para mantener a raya el desorden

La nueva rutina para ordenar no necesita mucho espacio ni esfuerzo. Con solo 5 o 10 minutos que dediques cada día a recoger, conseguirás una casa limpia y ordenada sin espacio para el estrés o el desorden.