El tercer lunes de enero, que cae en el 17 este año, se conoce comúnmente como el día más deprimente del año, por lo que se ha ganado el nombre de Blue Monday. ¿Pero por qué ese día resulta tan triste? Con estos hábitos saludables, los próximos meses serán un camino de rosas, evitarás la depresión invernal y llegarás de una pieza a la primavera.
El término “Blue Monday” fue acuñado por Cliff Arnall, profesor de la Universidad de Cardiff. Además del nombre, también creó una fórmula para el concepto, en el que tienen un papel importante factores como el mal tiempo, la motivación, los propósitos de Año Nuevo sin cumplir y el hecho de haber gastado demasiado dinero en Navidad.
Una sensación de tristeza o TAE en invierno
Esta fórmula puede parecer absurda, pero tiene algo de verdad. Es un hecho que muchas personas experimentan sentimientos de depresión durante los meses invernales, e incluso pueden padecer el llamado trastorno afectivo estacional o TAE. Quizás reconozcas algunos de los síntomas: menor motivación durante el invierno, duermes más o menos, cambios en los hábitos alimenticios, menos energía o simplemente no tienes ganas de hacer nada.
Las causas de este tipo de depresión invernal o sentimientos negativos son, en realidad, bastante obvios. Como los días son más cortos, ves menos luz y esto perturba tu reloj biológico. Una falta de luz también puede influir en tus niveles de serotonina, el neurotransmisor que afecta al estado de ánimo y a los niveles de melatonina, hormona que tiene un efecto sobre el sueño y el estado de ánimo.
8 consejos saludables para evitar la depresión invernal
Por suerte, puedes hacer varias cosas para pasar el invierno con felicidad y salud.
1. Intenta recibir luz suficiente
Dado que la luz tiene un gran impacto en el estado de ánimo, es importante que aproveches las horas de luz que hay durante el invierno. Ve a dar un paseo por la mañana o sal a la calle durante la pausa de la comida. Si estas opciones no funcionan, la fototerapia puede ayudar a estimular los niveles de serotonina y melatonina. Según Alfred Lewy, investigador de la Universidad de Oregón, el mejor momento para hacer la fototerapia es por la mañana.
2. Mantente en movimiento
El movimiento tiene un gran impacto en tu estado de ánimo. Pasar el invierno vegetando en el sofá puede resultar tentador, pero intenta ponerte en movimiento por lo menos una vez al día. Notarás que te sientes mejor. No estamos hablando de un entrenamiento HIIT de alta intensidad, simplemente puedes salir a dar un paseo o hacer un poco de yoga y notarás que los resultados son asombrosos.
3. Vitamina D
La vitamina D desempeña un papel importante en tus niveles de energía, pero se produce mediante la luz del sol y, durante el invierno, resulta difícil de encontrar. Tomar pastillas de vitamina D durante los meses más fríos no te hará daño. Comer pescado con un alto contenido de grasa, como el salmón o el arenque, también puede ayudar, porque contienen una mayor cantidad de vitamina D3, al igual que los huevos.
4. Desarrolla un buen ritmo de sueño
¿Conoces esa sensación de malhumor que te asalta cuando no has dormido lo suficiente? Para sentirte bien, es muy importante dormir lo suficiente y siete horas cada noche es lo mínimo. Desarrolla un ritmo en el que te vayas a la cama más o menos a la misma hora cada noche, también los fines de semana, y notarás que duermes mucho mejor.
5. Mindfulness
El mindfulness puede ayudarte a evitar la depresión invernal, pero también te ayudará a sobrellevarla mejor. Acepta que te sentirás peor o que no serás como de costumbre durante los próximos meses. Haz todo lo que puedas prestando más atención y a un ritmo más lento, porque también es más acorde al invierno.
6. Adapta tu alimentación
La comida sana y variada también puede ayudarte a combatir los sentimientos de melancolía durante el invierno. Empieza el día bebiendo agua y limón para una dosis de vitamina C, decora tus ensaladas con nueces y semillas para obtener vitamina E, y decántate por las verduras de hoja verde por su alto contenido en vitamina B12 y el pescado con un alto contenido en grasa por la vitamina D3, pero también por el aceite de pescado. Incorporar el té verde y la cúrcuma en tu dieta también es una buena idea.
7. Acepta el invierno
Puedes quejarte por el frío y los días cortos y sin luz, pero también puedes sacarle provecho pasando más tiempo en casa con la familia y los amigos. En Escandinavia, este concepto se conoce como hygge. Si no eres casero por naturaleza y tienes un carácter más bien aventurero, reserva un billete de avión para algún lugar donde haga calor.
8. Muéstrate agradecido
La dra. Amy Harrison, profesora en la Universidad Regents de Londres, investiga muchísimo en torno a la psicología positiva. Nos recomienda anotar de qué estamos agradecidos cada día. Así, te entrenarás para concentrarte en los aspectos positivos de tu vida.