Nuestra guía para llenar las Navidades de compasión y bondad

Las Navidades no solo sirven de colofón al resto del año, también son una época para despedir los días oscuros y cortos y atraer la energía positiva a nuestras vidas de cara al año nuevo. Este año, descubre cómo disfrutar de unas Navidades con alma y llenas de amor gracias a nuestra guía para fomentar la compasión y la bondad.

 

Cuando pensamos en las Navidades, normalmente nos vienen a la mente los grandes gestos, como encontrar regalos para todo el mundo, las cenas abundantes o el estrés de pasar la Nochebuena con esa abuela que no deja de pellizcar los mofletes. Sin embargo, son los gestos cotidianos los que crean conexiones y transmiten lo mucho que nos importan los demás. Mostrar a alguien que lo quieres y ser amable, requiere un esfuerzo, pero también genera un efecto dominó que va más allá de la persona que recibe tu cariño. De eso estamos seguros.

 

Practica la gratitud

Las Navidades pueden ser una época alegre para muchas personas, pero para otras puede resultar muy difícil. Demostrar tu gratitud durante esta época del año puede ser especialmente gratificante y cambiar la perspectiva de muchas personas. La gratitud funciona en ambas direcciones, así que tú también puedes sentirte más feliz. Cuando practicas la gratitud, de manera abierta, tu percepción del mundo cambia. Los pequeños obstáculos o problemas que te encuentras en el camino no tienen una repercusión tan grande sobre tu estado de ánimo, porque te centras conscientemente en lo positivo y no dejas tanto espacio a lo negativo.

 

Sigue leyendo para descubrir más cosas positivas sobre la gratitud.

 

Practica la bondad (también contigo mismo)

Las Navidades también pueden ser una época de estrés, tanto por la presión que nos ponemos a nosotros mismos como la que nos ponen los demás. Desde las fiestas en la oficina hasta los grandes eventos de Nochebuena y Nochevieja, pasando por las infinitas cenas entremedias, no es fácil mantener las sonrisas y el buen humor si no te cuidas un poco. Los estudios demuestran que practicar la bondad ayuda a reducir la ansiedad, fomenta la sensación de satisfacción y evita enfermedades, mientras que no hacerlo eleva el nivel de cortisol, la hormona del estrés.

 

Además, la bondad tiene que empezar contigo. Es casi imposible ser bueno con los demás si no lo eres contigo mismo. Si estás estresado o nervioso, no podrás ver lo que otros necesitan. Y si no ves lo que necesitan, no verás la necesidad de actuar.

 

Sigue leyendo para descubrir cómo practicar la bondad hacia ti mismo.

Las Navidades pueden ser maravillosas pero también estar llenas de tensiones familiares. Prueba esta meditación de calma para liberar el estrés de las discusiones familiares.

 

Practica el perdón (también contigo mismo)

Perdonar no consiste en encontrar excusas para las acciones de los demás o fingir que algo no te ha dolido. Se trata de tener consideración y ser generoso. Merece mucho la pena. Aprender de los errores, ya sean tuyos o de otra persona, dejar pasar las ofensas, seguir adelante y perdonar es muy importante para tu salud y bienestar mental. Practicar el perdón puede ayudar a aumentar tu autoestima, fomentar la fuerza interior y la seguridad. Puede incluso ayudar a sanar las heridas emocionales y los pensamientos negativos relacionados con la idea de no ser suficientes o con la ira. La ira puede ser satisfactoria durante un tiempo, pero, si no practicas el perdón, es posible que seas tú quien salga más perjudicado.

 

Practica la compasión

Es fácil dar por sentado que todo el mundo lo está pasando bien durante las Navidades, pero en esta época del año resulta más importante que nunca comprobar cómo están las personas que te importan. Haz preguntas significativas y escucha de manera activa. El mejor regalo que puedes hacer en Navidad es la empatía. Demuestra compasión (también hacia ti mismo) durante el día a día, pasa tiempo con otras personas, dedícales toda tu atención y encuentra momentos para estar solo contigo mismo y hacer las cosas que te gustan.

 

Lo mejor que podemos decirte es esto: “La vida no tiene por qué ser perfecta”.

 

Guía para llenar las Navidades de compasión y bondad

La presión de comprar los regalos perfectos es muy elevada y causa más angustia que alegría, según un estudio de 2006. El artículo puede tener unos años, pero sigue siendo igual de relevante. Este año, ¿por qué no pruebas una estrategia diferente.

 

  • Mándale a alguien un mensaje de voz bonito
  • Encuentra tiempo para esa persona
  • Escucha activamente lo que te cuentan
  • Llama a un ser querido
  • Empieza una rutina diaria personal que te aporte alegría
  • Date un capricho
  • Manda a alguien un regalo de autocuidado
  • Colabora con un refugio o hazte voluntario en alguna organización
  • Dona tu tiempo (para ayudar con tareas de casa, cuidando de los niños, etc.)
  • Empieza un diario de compasión

 

¡Disfruta de unas Navidades muy felices!

Laura Wabeke

Laura Wabeke

La traductora, editora y redactora Laura Wabeke siente fascinación por las palabras y las formas innovadoras en las que se pueden usar para expresarse. Después de nueve años como freelance en el sector de viajes, las agencias de medios, la publicidad y la edición de libros, esta redactora interna ahora domina el yoga, la meditación, el mindfulness y sigue la filosofía de la marca de encontrar la belleza y la felicidad en los pequeños detalles.